miércoles, 15 de febrero de 2012

CUENTO REFLEXIÓN: "LA ESTRELLA DE MAR"

Esta mañana, pensando en el día de ayer en el que comenzó su andadura este blog, hice un reflexión del porqué de este blog. Mi intención es ayudar a decenas, cientos, miles... de personas que también sientan como un objetivo de sus vidas el acercar a muchas personas a Dios desde sus propias experiencias, ya sean en catequesis, en una vida consagrada, como un matrimonio católico... Pero, claro, realmente con un ordenador y una serie de cuentos, reflexiones personales... material personal en definitiva, ¿a cuánta gente puedo llegar? Y, lo que es otra cuestión de la que reflexionaba esta mañana, ¿de qué forma podré adentrarme en los corazones de esas personas? ¿Les servirá realmente de ayuda?

Y, sorprendentemente, en todo este mar de dudas que me surgieron al recordar el inicio de este blog, se me vino a la cabeza una historia de autor desconocido que paso a relataros a continuación. Su título es "La estrella de mar" y dice así...

<< Cierto día, caminando por la playa, reparé en una persona que se agachaba a cada momento, recogía algo de la arena y lo lanzaba al mar. Hacía lo mismo una y otra vez...

Tan pronto como me aproximé me di cuenta de que lo que aquella persona agarraba eran estrellas de mar que las olas depositaban en la arena, y una a una las arrojaba de nuevo al océano.

Intrigado, lo interrogué sobre lo que estaba haciendo, a lo cual me respondió:

"Estoy lanzando estas estrellas marinas nuevamente al océano. Como ves, la marea es baja y estas estrellas han quedado en la orilla, si no las arrojo de nuevo al mar morirán aquí por falta de oxígeno".

Entiendo, le dije, pero debe haber miles de estrellas de mar sobre la playa. No puedes lanzarlas todas, son demasiadas. Y quizás no te des cuenta de que esto sucede probablemente en cientos de playas a lo largo de la costa, ¿no estás haciendo algo que no tiene sentido?

Tras esto, aquella persona sonrió, se inclinó y tomó una estrella marina y, mientras la lanzaba de vuelta al mar, me respondió: "¡para ésta sí lo tuvo!">>

Y lo cierto es que tal vez me haya pasado como a aquella persona que caminaba por la playa y, al fijar mi objetivo en tantas y tantas personas de partida, me haya podido venir un poco abajo con mi proyecto, pero la verdad es que el espíritu debe ser como aquella persona que lanzaba las estrellas al mar... Tal vez de momento este blog y muchísimas cosas que hacemos en nuestra vida parezcan, de partida, que no tienen sentido pero, por ejemplo, en mi caso con este blog, sé que, al menos, para tí que seguramente hayas reflexionado conmigo con esta historia, sí tuvo sentido este blog...

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